Los hombres y las mujeres no deberían compartir productos cosméticos para la piel. A continuación el porqué.
Es fácil caer en la tentación de compartir productos de cuidado facial con nuestra pareja, madre o hermana, ¿verdad? Pero, aunque la piel de hombres y mujeres sea similar en algunas cosas, las diferencias que existen entre ellas son lo suficientemente importantes como para no usar los mismos productos. En este artículo te contamos por qué la piel masculina y femenina necesita cuidados específicos y cómo estas diferencias afectan tu rutina diaria.
¿Qué hace que la piel masculina y femenina sea diferente?
Grosor de la piel:
La piel de los hombres es un 25% más gruesa que la de las mujeres. Esto se debe a los niveles de testosterona, la misma hormona que también les proporciona más colágeno, ese aliado que ayuda a mantener la piel firme y elástica. Sin embargo, el proceso de envejecimiento es distinto: mientras los hombres pierden colágeno de manera constante a lo largo de su vida, en las mujeres la pérdida de esta proteína se acelera tras la menopausia.
Piel más grasa:
¿Has notado que los hombres suelen tener la piel más brillante? Esto se debe a que sus glándulas sebáceas producen el doble de sebo que las de las mujeres. Y aunque eso pueda sonar ventajoso en cuanto a hidratación, en realidad los hace más propensos a tener poros obstruidos y problemas como el acné. Además, su pH es más bajo, lo que significa que la piel masculina es más propensa a desarrollar impurezas.
Poros más grandes:
Los hombres tienen poros más grandes y numerosos, lo que explica por qué son más propensos a los puntos negros y otras imperfecciones. Así que, sí, ese problema de piel que te incomoda tiene una explicación biológica. ¡No es solo mala suerte!
Celulitis (o más bien, la falta de ella):
Mientras que el 90% de las mujeres lidian con la celulitis, los hombres prácticamente no saben lo que es. Esto se debe a que el tejido subcutáneo masculino es mucho más fuerte y menos propenso a acumular grasa. Así que, si eres hombre y te preguntabas si deberías usar los productos anticelulíticos de tu pareja, la respuesta es: probablemente no los necesitas.
Envejecimiento:
Aunque hombres y mujeres pierden colágeno a partir de los 20 años, los signos de envejecimiento se manifiestan de manera diferente. Los hombres suelen aparentar menos edad hasta que, de repente, las arrugas aparecen de manera mucho más pronunciada. Las arrugas de los hombres son más profundas y, en general, se suman otros signos como la flacidez, las ojeras y las bolsas bajo los ojos.
El afeitado, un arma de doble filo:
Afeitarse es una práctica común entre los hombres, pero no está exenta de consecuencias. Este hábito elimina las células muertas de la piel que normalmente protegen las capas más jóvenes de los efectos del sol, dejando la piel más sensible y vulnerable. El 40% de los hombres tiene problemas de piel relacionados con el afeitado, desde irritaciones hasta acné. Además, afeitarse con cuchillas desafiladas o sin suficiente lubricación puede generar cortes y erosiones. ¡A tener cuidado!
Celulitis (o más bien, la falta de ella):
Mientras que el 90% de las mujeres lidian con la celulitis, los hombres prácticamente no saben lo que es. Esto se debe a que el tejido subcutáneo masculino es mucho más fuerte y menos propenso a acumular grasa. Así que, si eres hombre y te preguntabas si deberías usar los productos anticelulíticos de tu pareja, la respuesta es: probablemente no los necesitas.
¿Tienen algo en común? ¡Por supuesto!
Aunque hombres y mujeres tienen pieles diferentes, algunas reglas de oro aplican para ambos:
Limpieza e hidratación: Independientemente de tu sexo, la limpieza diaria es esencial para mantener la piel sana. Y no olvides hidratar después.
Beber agua: La hidratación también viene desde dentro, así que mantenerte bien hidratado es clave para lucir una piel fresca y saludable.
Cuidado con el agua caliente: Las duchas muy calientes pueden resecar la piel, así que es mejor optar por una temperatura tibia.
¿La conclusión? Personaliza tus cuidados
Si bien es fácil querer compartir productos por comodidad o para ahorrar tiempo, la realidad es que la piel masculina y femenina necesita tratamientos específicos. Desde el grosor de la piel hasta los poros y la producción de grasa, las diferencias son claras. Así que, la próxima vez que pienses en usar la crema de tu pareja, ¡piénsalo dos veces! y recuerda; en Dr, Caiman hacemos cosmética honesta y centrada en lo esencial, tenemos muy en cuenta las particularidades de la piel masculina.